jueves, 30 de septiembre de 2010

UN DÍA ESCEPCIONAL

Esta mañana, las clases han terminado a las once de la mañana, por órden de la directora, ya que esta tarde a las cuatro, había un desfile, en honor a los derechos de los niños y dejando salir a los niños una hora antes, es la manera de que por la tarde asistan a otros actos relacionados con la escuela.

De camino a casa, sobre las once y media me he pasado por la pinacoteca, donde ponen películas interesantes todos los jueves. Pues solamente iba a pedir esta información y he terminado sentada en el despacho del gerente de educación, recreación y tiempo libre, de Piura, tratando sobre un pequeño proyecto en educación en valores, para trabajarlo con niños que viven en los asentamientos humanos. ¿Ves como en Perú, todo es posible? Así que mañana tengo una reunión con el gerente y los involucrados en este asunto, para que me comenten de qué trata el tema y si puedo colaborar de alguna manera. ¡Esto es increible! Voy a tener la posibilidad de ir mañana a un asentamiento humano, a visitar otra realidad educativa, ver en lo que puedo colaborar

Después de esto tan inimaginable, me he encontrado con mi profesor de baile, también curioso y nos hemos ido a comer un ceviche y un seco de chavelo a las afueras de Piura, comida completamente peruana, en medio de un asentamiento humano. Y por supuesto, un manjar mmmmm, rico, rico.
Este profe, me ha ofrecido un trabajo en un gimnasio en caso de que vuelva a Piura, ¿también increible eh?Jajaja.

De seguido, he ido a la concha acústica, lugar de reunión para el pasacalles que iban a realizar las maestras del colegio. Yo iba a apoyar la iniciativa, por los derechos de los niños, a apoyar a mis compañeras de trabajo... Y de lleno, me he visto dentro del pasacalles, por toda la ciudad, cantando, gritando, bailando sin parar, acompañada de maestras, mamás, algún papá que otro y niños del colegio. ¡Han sido unos momentos maravillosos, porque me he sentido completamente integrada en el colegio, en la ciudad, con los padres, con los niños, con el motivo del pasacalles... Realmente bonito.
La pena es, que este sentimiento que ya tengo dentro, de bienestar, se tenga que acabar en poquitos días...

Con todo, ha sido un día con un valor especial y es que, cuando te dejas llevar, cuando dejas que la vida fluya a su ritmo, todo sale bien. Toda la energía del planeta se compacta y llega a ti directamente ofreciéndote la parte más bonita del mundo, para que lo saborees. Porque solamente cuando dejas que todo fluya, cuando estás abierto al mundo, a la aceptación y al momento, es cuando esto sucede.

Os dejo con unas imágenes del pasacalles, por los derechos de los niños, que se merecen todo lo mejor:



Algunos niños y sus familiares del aula en que realizo el proyecto.

Con las maestras representantes del 006 Pachitea,
 auténticas animadoras del evento.

Bailando y cantando durante el desfile.



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